Desde siempre, hemos vivido valorando lo artesanal, lo hecho con las manos, con el corazón. Creemos que en cada creación hay algo más que materia prima: hay historia, hay emoción, hay un pedacito de alma en cada trocito de su elaboración.
Nos inspira la belleza de lo original, de lo único, de aquello que no se encuentra en serie, sino que se siente. Porque lo especial no se mide en cantidad, sino en el amor y la dedicación con los que está hecho.
Hemos crecido conociendo el modo de vida laboral tradicional, ese en el que el esfuerzo y las horas de trabajo parecen ser la única clave del éxito. Pero queremos enseñarles a nuestras hijas que otro camino es posible. Que pueden vivir de su pasión, que pueden crear su propia realidad, que los sueños no son solo para imaginarse, sino para trabajarlos y hacerlos realidad. Sabemos que el camino no es fácil, que hay aprendizajes constantes y momentos duros, pero creemos que vale la pena.
En Lilas y Magnolias, combinamos lo mejor de la tradición con la innovación, creando piezas que no solo se ven, sino que se viven. Nos apoyamos en la tecnología para dar forma a nuestras ideas, pero sin perder nunca la calidez de lo hecho a mano.
Cada objeto que creamos es un reflejo de nuestra pasión por lo auténtico, por lo que emociona y deja huella. Porque lo más bonito de algo hecho con el corazón es que se nota. Y eso es lo que queremos compartir contigo.
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